Preparación de un terreno para una obra de construcción

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Si en algo coinciden todos los procesos de preparación de una obra es que no son para nada glamurosos, sin embargo es parte fundamental en la ejecución correcta de un proyecto de construcción. Y es que la preparación de un terreno para la construcción es uno de los trabajos iniciales que debemos realizar para llevar a cabo cualquier obra, cuya configuración debe completarse de forma correcta antes de empezar con el proceso de construcción si se quiere tener éxito en el proyecto.

Preparación del terreno para proyectos de construcción: Pasos a seguir

A continuación, analizaremos los cinco pasos necesarios en toda preparación de obra para proyectos de construcción:

Despejando el terreno

 El primer paso en toda preparacón de obra es la limpieza del terreno. Es fundamental que todo el terreno quede nivelado y despejado, lo cual incluye la demolición de edificios, la retirada de árboles y/o la eliminación de estructuras subterráneas. Es importante eliminar de primeras todos estos obstáculos para que no entorpezcan a lo largo del proyecto, ya que podrían afectar al futuro proceso de construcción.

Estudio del terreno

 El proceso de agrimensura del tereno es un requisito obligatorio en todo proceso de zonificación y autorización que se realice. Esto se lleva a cabo mediante la topografía, que viene a ser la traducción del conjunto de planos del contratista en una representación real del emplazamiento del proyecto.

 Y es que es el topógrafo el responsable de vigilar el terreno y delimitar la zona exacta en la que se construirá el proyecto previsto.

Pruebas del suelo

 Antes de adquirir un terreno en el que llevar a cabo un proyecto de construcción, es necesario realizar un análisis del suelo para así determinar la composición principal del mismo y saber de antemano dos datos fundamentales, como son la capacidad de absorción de agua y la capacidad de soportar la estructura deseada. Esta prueba es responsabilidad del ingeniero de la obra, el cual debe insistir en que se realicen todos los procedimientos de prueba del suelo necesarios antes de iniciar cualquier tarea estructural.

 Como es lógico, en caso de que el suelo del emplazamiento no sea lo suficientemente adecuado para los futuros proyectos, es probable que haya que buscar otro emplazamiento que tenga un suelo apropiado para los proyectos.

 A continuación, vamos a analizar los diferentes tipos de suelo que nos podemos encontrar:

  • Clase A (Aceptable): la mayor parte de las rocas y la arena tienen poco o ningún desplazamiento de terreno.
  • Clase S (Satisfactorio): terrenos arcillosos ligeramente reactivos que tienen poco desplazamiento de terreno.
  • Clase M (Moderada): Lugares con hendiduras moderadas o arcilla reactiva que pueden experimentar un desplazamiento moderado del terreno.
  • Clase H1 y H2 (Altamente reactiva): Los sitios de arcilla son altamente reactivos y pueden experimentar un mayor desplazamiento de terreno.
  • Clase E (Extrema): Lugares extremadamente reactivos que son propensos a experimentar un desplazamiento de terreno extremo.
  • Clase P (Problema): Sitios que incluyen suelos más blandos tales como una hendidura o arcilla blanda. En estos casos el suelo está siempre sujeto a la erosión.

Diseño del plan de obra

 Una vez se hayan llevado a cabo las pruebas del suelo, será preciso instalar todas las fosas sépticas y drenajes necesarios. Es por ello que el siguiente paso será modificar el diseño para indicar la ubicación de las instalaciones y las fosas sépticas, además de crear un registro permanente de las zonas situadas bajo tierra. En estos casos, el uso de un programador de cuadrillas superior ha demostrado ser una herramienta muy competente en lo referente al diseño del plan de obra.

 Es importante que el plano de la obra muestre todos los caminos de acceso para las zonas de almacenamiento temporal y los vehículos de construcción, así como mostrar dónde debe colocarse el edificio una vez construido.

 A diferencia de otros pasos que se dan durante la preparación de la obra, estas revisiones se realizan en la oficina, mientras que el plano de la obra se actualiza siempre sobre el terreno.

 [H3]Investigación de la obra

 El siguiente paso en la preparación del terreno es la investigación geotécnica del emplazamiento, la cual se realiza con el objetivo de caracterizar el estado de las rocas, el suelo y las aguas subterráneas de cualquier emplazamiento propuesto.

 Es gracias a una investigación geotécnica del emplazamiento que somos capaces de definir la evaluación de las condiciones del lugar y la recopilación de datos para construir y diseñar los cimientos de una estructura, como pueden ser aparcamientos, puentes, carreteras y edificios.

Puntos clave

 Hasta aquí el artículo de hoy con todo lo referente a la preparación de un terreno antes de iniciar una obra de construcción.Servicios de adecuación de terrenos

 Recuerda, para construir en un terreno nuevo, es importante que el lugar elegido esté listo y preparado para la construcción. Y es que son las actividades preparatorias, tales como el desbroce y estudio del terreno o la investigación del mismo, las que definirán el éxito del proyecto. Si no lo tienes aún del todo claro, te recomiendo que hagas uso de servicios de adecuación de terrenos, los cuales pueden facilitar en gran medida todo el proceso.

 Por tanto, como conclusión, vemos que la preparación del terreno es necesaria para cualquier proyecto de construcción. Cierto es que algunos proyectos pueden requerir más preparación y métodos que otros, pero esto es algo que ya sabíamos desde un principio, y es que no todos los proyectos de construcción son iguales.