Los inicios de la metodología BIM
Los inicios de la metodología BIM datan de la década de los 70 cuando Charles M. Eastman en un artículo publicado por la Universidad Carnegie-Mellon titulado como Un Esquema Descriptivo del Sistema de un Edificio (An Outline of the Building Description System) propone la utilización de elementos gráficos tridimensionales capaces de contener información geométrica y no geométrica asociada al elemento que representan, de manera tal que la información se encuentre siempre actualizada con el mínimo esfuerzo y esté disponible para todos los involucrados en el desarrollo de un proyecto de edificación. Esto es una simplificación del planteamiento del problema expuesto por Charles Eastman en su artículo, pero la idea es ilustrar los inicios de lo que hoy conocemos como Metodología BIM.
Esta investigación y muchas otras dieron paso a lo que hoy conocemos como BIM, estableciendo un nuevo marco de referencia en la industria AECO y cambiando los antiguos paradigmas asociados a los procesos involucrados en el desarrollo de proyectos de construcción.
En la actualidad, el acrónimo BIM ha pasado por un proceso evolutivo en el que el significado ha ido cambiando de Model a Modelling y finalmente a Management, pero siempre teniendo como referencia a la información como el centro de desarrollo de los proyectos; pero en este caso, todo bajo un ambiente virtual que permite “probar” en un entorno controlado todos los diseños que serán utilizados finalmente en la etapa de construcción de los proyectos.
La metodología BIM está transformando la forma en que se realizan los proyectos de construcción en el sector AECO, de tal modo, que ya permite gestionar todo el ciclo de vida de un proyecto, estableciendo sinergias con áreas de la ciencia como la Geografía, Topografía, Geodesia, entre otras, a través de los Sistemas de Información Geográfica.
PMI y BIM
El Project Management Institute es el ente por excelencia en el establecimiento de las mejores prácticas para el desarrollo de proyectos a través de La Guía de los Fundamentos para la Dirección de Proyectos o PMBOK por sus siglas en inglés (A Guide to the Project Management Body of Knowledge). Dentro de esta guía, el PMI define los procesos de la dirección de proyectos y estos están agrupados en cinco categorías conocidas como Grupo de Procesos de la Dirección de Proyectos:
- Grupo de Procesos de Inicio.
- Grupo de Procesos de Planificación.
- Grupo de Procesos de Ejecución.
- Grupo de Procesos de Monitoreo y Control.
- Grupo de Procesos de Cierre.
Por otra parte, la metodología BIM define las dimensiones BIM, donde cada una de ellas enmarcan unas actividades del proyecto que, a su vez, se agrupan dentro de las fases de desarrollo de proyectos de construcción:
- Diseño.
- 1D Idea (Formación e investigación).
- 2D Boceto (Diseño conceptual, programación y diseño detallado).
- 3D Modelado BIM (Creación modelo BIM, fabricación de objetos BIM, logística de la construcción).
- Construcción.
- 4D Tiempos (Simulación y planificación del tiempo).
- 5D Costos (Control dinámico de gastos).
- Operación.
- 6D Sostenibilidad (Análisis y seguimiento energético, as-built).
- 7D gestión BIM (Operación y mantenimiento, renovación o demolición).
En este punto se puede establecer una correlación entre los Grupos de Procesos de la Dirección de Proyectos que establece el PMI, las fases de un proyecto de construcción y las dimensiones BIM, lo que permite engranar toda la base del conocimiento para desarrollar los proyectos de construcción con toda la competencia adquirida y la tecnología disponible, manteniendo siempre como eje central el flujo de información y la comunicación entre los stakeholders.
Qué no es BIM
Ahora bien, esta metodología de trabajo se apoya en la utilización de muchas herramientas informáticas, algunas de ellas son de uso cotidiano, como por ejemplo Microsoft Word o Adobe Acrobat; otras son más especializadas y por ello, son fácilmente asociadas con la metodología BIM, por ejemplo, Revit o Navisworks.
Sin embargo, esta asociación directa de las herramientas con la metodología tiende a crear una confusión, por lo que con mucha frecuencia se escucha hablar de BIM, cuando están haciendo referencia a una herramienta que se utiliza para el desarrollo de ciertas actividades bajo este marco de trabajo.
En este sentido, Revit, Civil 3D, Navisworks, Infraworks, solo por citar algunos, son software que permiten realizar tareas de modelado, es decir, que nos proporcionan las herramientas necesarias para la creación de esos elementos gráficos tridimensionales a los que hacía referencia Charles Eastman en su artículo, y que son la base de los datos y de la información que permiten el trabajo colaborativo.
Este trabajo colaborativo es el que permite mantener el flujo constante de información y garantizar la comunicación entre los stakeholders del proyecto, por lo que su importancia es vital para el desarrollo de esta metodología de trabajo.
Lograr mantener la integridad de la información dentro de un entorno colaborativo ha llevado a la creación de las normas ISO 19650, las cuales pretenden estandarizar la gestión de la información a lo largo de todo el ciclo de vida de un activo construido utilizando el modelado de información para la edificación.
Para concluir, es importante que el lector entienda la diferencia existente entre la metodología BIM y las herramientas BIM, que permiten el desarrollo de tareas y actividades bajo esta forma de trabajo.
Escrito por:
Raúl Hernández
Gerente de Servicios MCAD